Una de las cosas que por su excelencia destaca en la cultura alemana, es el pan. La mayor variedad de panes óptimos a nivel nutricional la podemos encontrar en Alemania, infinitos panes de diversas formas y sabores nos deleitarán, y nosotros...nos dejaremos deleitar. Porque, ¿quién no ama un buen pan?.

Hoy os traigo una receta súper sencilla y eficaz a la par. Desde que llegó a mis manos, la hago todas las semanas, corto y congelo. Y voy sacando rebanadas y tostando en la tostadora o sartén. No me enrollo más y...¡manos a la obra! 

INGREDIENTES:

• 280 g de harina integral (yo usé de espelta)


• 1 paquete de levadura


• 100 g de pipas y/o nueces o semillas ( yo hice un mix de los tres)


• 2 cucharadas de quinoa


• 2 cucharadas de vinagre de manzana


• 1 yogurt


• 180 g de agua


• sal

PREPARACIÓN

1. Ponga todos los ingredientes en el vaso y programe 3 minutos velocidad espiga. Si al terminar vemos que le falta agua o harina, rectificamos y programamos otro minuto a velocidad espiga. Depende mucho del tipo de harina, tiene que quedar consistencia algo pegajosa pero que pueda manajarse sin trabajo. 


2. Reservar en el vaso durante una hora


3. Introducir en un molde de aluminio previamente engrasado con un poco de aceite


4. Hornear a 180º durante 40-50 min. (depende del horno).